29.7.12

El otro dulce...

En algún momento de mi vida tuve un pololo que era realmente mañoso. O sea, de verdad mañoso. Si la comida no estaba compuesta por ingredientes como queso, carne, palta, pollo, tallarines o salsa de tomate, las probabilidades de que probara algo fuera de ese universo eran casi nulas. Invertí bastante tiempo en insistir en que hay más en la vida que bistec con puré, pero la comida no era lo suyo. En fin, hay gente para todo en el mundo. En contraparte, mi familia siempre ha sido variada a la hora de comer, inculcándonos a todos desde chicos a comer, o por lo menos a probar de todo. Desde que tengo memoria ha habido sobre la mesa salsa de arándanos para acompañar carnes, ciruelas envueltas en tocino, o ensaladas con queso Camembert y vinagretas con miel. Hoy en día, ese gusto por mezclar ingredientes que quizás en su naturaleza nunca se hubiesen topado, como lo es la combinación dulce con salado, se ha masificado hasta llegar a la mesa del día a día…y por suerte! Es bueno que exista más variedad y competencia, por que obliga a quienes están en el rubro de la cocina, o quienes como esta humilde escritora se interesan por comer rico tratando de innovar, aunque sea en el almuerzo del lunes, a generar nuevas recetas que se proyecten para siempre ajustarlas y dar un salto más allá. Hace un par de días estaba haciendo hora en una panadería y vendían unas cajitas con mini sopaipillas tiernísimas. En la noche tenía un aperitivo en la casa de una amiga, entonces se me ocurrió comprarlas para llevarlas acompañadas con pebre. Iba caminando y me puse a pensar que en realidad las sopaipillas quedan ricas con un acompañamiento dulce como miel, pero nada que ver llevar eso a un aperitivo de noche. Entonces, idea: Por qué no hacer un pebre que mezclara lo mejor de la receta tradicional con un toque dulce? El resultado…Pebre de Piña! Demasiado rico, fresco y fácil de hacer. Nada que decir, combina perfecto con las famosas sopaipillas, e incluso como acompañamiento para Tacos (puedo decirlo con veracidad porque fue justo eso lo que comí al día siguiente).

Pebre de Piña

  • 1 lata de piña en conserva
  • 1 cebolla mediana
  • 1 puñado de cilantro picado
  • 1 cda de merkén
  • 1/2 taza de jugo de limón
  • 3 cdas de aceite de oliva
  • Sal y pimienta

Preparación

  1. Cortar la cebolla y la piña en brunoise (cubos pequeños). Juntar en un bowl.
  2. Agregar cilantro picado, merkén, jugo de limón y aceite de oliva. Salpimentar.
  3. Servir como acompañamiento de sopaipillas, nachos, tacos o incluso para un choripán.


XO Lore

No hay comentarios: